Demi Moore entiende que otras personas se operen y afirma que nunca juzgaría a alguien por hacerlo; de hecho, Demi Moore está abierta a la posibilidad de la cirugía estética en el futuro. Ha contado que cuando se "mire en el espejo y se ponga a llorar" a lo mejor recurre a la cirugía estética, aunque de momento prefiere ser una mujer hermosa con su edad y no intentar aparentar tener 30 años.
Actualización de la noticia:
La "confesión" de la actriz de que nunca se había operado de cirugía estética, ha provocado una ola de incredulidad y sarcasmo en internet. Demi Moore reaccionó reafirmando en su página de Twitter que nunca se había puesto en manos de un cirujano plástico y añadiendo, que tiene estrías y un poco de flacidez.
Hoy (5 de septiembre de 2009) he leido, en la edición escrita del díario ABC (España), que Demi Moore, reconoció el año pasado haberse sometido a baños de trementina y terapia con sanguijuelas para aclarar y desintoxicar su sangre. Rosa Belmonte autora de la noticia realiza el siguiente comentario: "resulta curioso que la cirugía plástica sea un tabú y, sin embargo, las celebrities sí reconozcan ponerse sanguijuelas en el ombligo para ser succionadas (...) o aplicarse lavativas para dejarse el colon como la patena. Pero no admiten la más ortodoxa cirugía plástica."
Demi moore interpretará a una exmodelo adicta a la cirugía estética en la nueva serie norteamericana The Beatiful Live.
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